Lo que coloquialmente describimos como desmayo, en términos médicos se denomina síncope. Consiste en una pérdida momentánea de la consciencia,
por lo que el individuo, en este caso el gato, cae al suelo sin poder
evitarlo y sin ser consciente de ello. Puede tener una duración
variable.
Pero, ¿cómo se produce el síncope en los gatos? Principalmente se debe a una falta de aporte de oxigeno al cerebro,
que puede estar causada por la disminución del flujo sanguíneo, la
disminución de la presión arterial, la presión parcial de oxigeno
arterial o la disminución de la concentración de hemoglobina. Puede
estar acompañado de babeo y micción en algunas ocasiones, aunque cabe
resaltar que no es lo más frecuente.
Por lo general, el gato se recupera tras pocos segundos,
pues los episodios son cortos y repentinos. Es probable que al
despertar se muestre desconcertado y nervioso, además de tembloroso.
Esta desorientación debería desaparecer en poco tiempo.
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